Arriaca acaba de incorporar a la producción de sus cervezas artesanas un equipo de filtración tangencial, convirtiéndose en la primera microcervecera artesana europea y una de las primeras en el mundo en introducir esta nueva tecnología que lleva aplicándose con éxito en la industria farmacéutica y vitivinícola durante años y que mejora ostensiblemente la calidad del producto final.
Este sistema de filtrado tangencial diseñado ex profeso para microcerveceríasha sido desarrollado por la firma española BevTec y la alemana Romfil en colaboración con Arriaca, en cuyas instalaciones se han llevado a cabo durante los últimos meses la parte funcional del proyecto correspondiente al testeo, metodología de trabajo y ajuste del sistema.
El prototipo fue presentado hace unos meses en la feria internacional Brau Beviale de Nüremberg (Alemania).
La tecnología incorporada por Arriaca presenta cuatro módulos de filtrado con una capacidad de 2.000 litros/hora, diseñado a medida por la firma alemana Romfil, que cuenta con una excelsa experiencia en todo el mundo en procesos de filtrado.
¿Qué es la filtración de flujo tangencial?
Existen diferentes tipos de filtrado, pero la finalidad básica de todos ellos es eliminar la turbidez de la cerveza. Los sistemas convencionales de filtrado se basan en hacer atravesar perpendicularmente la cerveza a través de medios filtrantes como láminas de celulosa en filtros de placas o tierras de diatomeas en filtros de campana. Estos sistemas utilizan habitualmente coadyuvantes y generan residuos que después es necesario tratar.
Por el contrario, la filtración tangencial consiste en hacer circular la cerveza sin filtrar dentro de un circuito cerrado a lo largo de una serie de filamentos huecos de fibra o de cerámica, de una porosidad determinada, a través de los cuales va manando la cerveza filtrada, lateralmente al flujo, en un proceso continuo de autolimpieza.
La cerveza libre de turbidez se recoge en otro circuito circunscrito al primero, también cerrado, y se trasvasa a los tanques de guarda, donde queda lista para el envasado final.
A diferencia de los otros sistemas, no requiere medios filtrantes desechables, ni coadyuvantes, ni genera residuos.
La filtración tangencial elimina los residuos generados durante la fermentación de la cerveza a través de una tecnología no invasiva y que, por tanto, no altera el producto cervecero, otorgándole mayor brillantez y limpieza y aumentando sus propiedades de conservación.
Se trata de un sistema novedoso para las cerveceras que originariamente se introdujo en el sector farmacéutico y alimenticio y que utiliza una membrana inerte en forma de filamento hueco de alta tecnología que en ningún caso produce intercambio de propiedades alguno con la cerveza.
“Es una especie de muro que simplemente retiene la turbidez de la cerveza y su microbiología, manteniendo el resto intacto”, señala Wolfgang Reininger, CEO de BevTec Beverage Technologies.
José Ángel Santiago, cervecero de Arriaca, sostiene que es “este sistema supone la cuadratura del círculo en cerveza artesana, porque conseguimos una gran estabilidad en la cerveza, sin utilizar químicos y sin alteración alguna de aromas y sabores, que es nuestra obsesión”.
“Desde el sector microcervecero pretendemos ser el abanderado de la investigación y el desarrollo de la cerveza en España, sector que lleva décadas encorsetado en nuestro país”, ha señalado, por su parte, Jesús León, CEO de Arriaca. “Creemos que este nuevo sistema de filtrado será tendencia y marcará una revolución en el mundo de la cerveza en los próximos años”, apunta.
“En nuestra mirocevecería”, abunda, “hemos apostado desde el principio por la investigación, por la evolución y por la mejora continua de nuestros procesos y nuestros productos”, recuerda. “Y no cabe duda de que el filtrado tangencial es un paso más, muy importante, para la industria cervecera en general y para la craft en particular”.
Ventajas del filtrado tangencial
- Tecnología no invasiva: no altera ni el aroma ni el sabor de la cerveza, manteniendo íntegras sus propiedades organolépticas.
- Limpieza y brillo: elimina las partículas generadas en el proceso de fermentación, generando una cerveza más limpia y brillante.
- Estabilidad y calidad: aumenta el periodo de conservación óptima y con las propiedades originales de la cerveza, y ayuda a proteger el producto cuando se producen cambios bruscos de temperatura o golpes y movimientos durante el proceso de transporte.
- Circuito cerrado: es un sistema de filtrado de circuito cerrado, lo que evita la oxidación de la cerveza y propicia la conservación de la carbonatación natural.
- Física vs química: es un sistema totalmente mecánico, basado en la física, no en la química, por lo que no requiere añadidos ni coadyuvantes.
- Sostenible y ecológico: no se generan residuos ni desechos de medios filtrantes durante el proceso, lo que reporta un beneficio ecológico.