Este martes, 11 de mayo, entran en vigor los nuevos límites de velocidad en las vías urbanas. La velocidad máxima a la que se puede circular en aquellas vías con plataforma única de calzada y acera se reduce a 20 kilómetros por hora y en las que tengan un sólo carril por sentido de circulación, no se podrá transitar a más de 30 kilómetros por hora. Además, se fija en 50 kilómetros por hora la velocidad máxima en vías de dos o más carriles por sentido de circulación.
El objetivo de esta nueva regulación es mejorar la seguridad en la circulación en las ciudades, reduciendo la siniestralidad especialmente entre peatones, ciclistas y motoristas, y, al tiempo, contribuir a reducir las emisiones contaminantes de los vehículos a la atmósfera y el nivel de ruido. Según las estimaciones técnicas, en caso de atropello, con estas reducciones de velocidad, la probabilidad de supervivencia aumentará en torno a un 80 por ciento y, en caso de accidente, los propios conductores y ocupantes de vehículos tendrán menos riesgo de sufrir heridas de gravedad. Si la velocidad del vehículo que impacta es de 30 kilómetros por hora, el riesgo es de fallecimiento en un atropello es de un 10 por ciento, mientras que si la velocidad es de 50, ese riesgo se eleva al 90 por ciento. La DGT destaca que se reduce a la mitad la distancia que se necesita para detener el vehículo, al pasar de a 30 kilómetros por hora.
Apuesta por la sostenibilidad
El concejal de Derechos y Libertades, David Pinillos, ha hecho un llamamiento a los conductores para que respeten los nuevos límites. "Va a suponer un esfuerzo de adaptación que, a la larga, será positivo para el conjunto de las sociedades", defiende. El edil ha recordado que "el Ayuntamiento de Azuqueca lleva años apostando por una movilidad urbana sostenible, con actuaciones como la implantación de la plataforma única en el casco y la apuesta por el uso de la bicicleta, con un proyecto tan ambicioso como 'Caminos escolares seguros'".
Según los datos de Tráfico, en 2019 los muertos en siniestros de tráfico en las ciudades se incrementaron un 6 por ciento, de los cuales, el 82 de los fallecidos en ciudades en aquel año eran usuarios vulnerables, es decir, peatones, ciclistas y motoristas.
Para ayudar a su implantación, la Dirección General de Tráfico (DGT) y la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) han lanzado un manual que se puede consultar AQUÍ.