Decenas de familias enteras con abuelos y niños, joviales grupos de amigos, aficionados a contemplar la magia de nuestros cielos y multitud de curiosos. Muchos de ellos reconocían que era la primera vez que salían al campo a avistar la bóveda celeste. Más de 400 personas desfilaron la noche del viernes y hasta altas horas de la madrugada de este sábado por el Punto de Observación Astronómica del bosque de Valdenazar para observar las Perseidas. Era la multitudinaria respuesta al llamamiento que había hecho AstroYebes para contemplar la lluvia de estrellas más popular del año.
Provistos de neveras, mantas, hamacas, telescopios y binoculares, se prepararon para amenizar la espera. “Fue una auténtica celebración astronómica a la que acompañó una noche de temperatura agradable y un cielo despejado de nubes que quiso sumarse a la fiesta”, explica Miguel Cócera, alcalde de Yebes.
Es cierto que las previsiones auguraban una de las Perseidas de mayor intensidad de los últimos años, con una frecuencia de más de 200 meteoros por hora. Sin embargo, la pertinaz presencia de la Luna, que a las tres de la madrugada aún seguía deslumbrando en el horizonte, impidió ver en su plenitud este fenómeno atmosférico. “Muchas familias con niños de corta edad tuvieron que regresar a sus hogares tras haber visto apenas unas pocas estrellas fugaces, que se recibieron con vítores y aplausos a horas ya intempestivas”, comenta el primer edil. Sin embargo, fueron muchos los que aguantaron estoicamente hasta altas horas de la madrugada con la esperanza de ver más meteoritos sobre el firmamento de Valdenazar. Y seguro que mereció la pena permanecer al acecho.
Pero la cita al Punto de Observación Astronómica de Valdenazar fue mucho más que las Perseidas. Sirvió entre otras para confirmar que la afición a la astronomía y al conocimiento del Universo que nos rodea es un fenómeno que está en auge. “Una realidad que seguro se confirmará los días 24 y 25 de septiembre en la tercera edición de Expoastronómica 2016, que este año llega repleta de novedades y en la que confiamos en batir el récord de participación de la última edición”, augura Miguel Cócera.
El programa de actividades ya está cerrado e incluye importantes novedades dirigidas, sobre todo, a las familias y al público más joven. Se puede consultar en la web
www.expoastronomica.aytodeyebes.es y, al igual que en la edición de 2015, incluye un ciclo de conferencias, exposiciones de modelismo y taller de cohetes, lanzamientos y talleres para niños, work-shops y actividades para todos los públicos.
Con ayuda de un telescopio reflector Dobson y un catadióptrico que AstroYebes puso a disposición del público, a los visitantes no les importó hacer cola para observar multitud de cuerpos celestes. “Cierto es que las estrellas fugaces se resistieron a hacer acto de presencia, pero a cambio se pudo gozar de la belleza de un sinfín de objetos del Universo profundo y el Sistema Solar”, matiza el alcalde de Yebes. Decenas de personas pudieron admirar los mares y cráteres de la cara visible de una Luna espectacular y luminosa en cuarto creciente, el color anaranjado característico de Marte y los impresionantes anillos de Saturno.
Pero también la nebulosa planetaria Dumbbell o la galaxia de Andrómeda. Sin embargo, uno de los momentos álgidos de la noche llegó cuando apenas pasaban 20 minutos de las diez de la noche y la multitud asistió perpleja al paso vertiginoso de la Estación Espacial Internacional (ISS) a 400 kilómetros de distancia y 27.500 km/h sobre sus cabezas. O tras observar dos Iridium por debajo de la constelación de Andrómeda, los satélites artificiales de comunicaciones que giran en órbitas bajas alrededor de la Tierra.
Con la puesta de largo del Punto de Observación Astronómica de Valdenazar, el Ayuntamiento de Yebes y AstroYebes cumplen un sueño. “Que no es otro que disponer de un lugar de encuentro para que los muchos aficionados a la astronomía que hay en el Corredor del Henares y Guadalajara puedan compartir experiencias y vigilar los cielos nocturnos durante todo el año”, resume el alcalde de Yebes.