Los trillanos lo pasaron de miedo en el El “Horror Circus”

A partir de las diez y media de la noche, payasos malvados, equilibristas desequilibrados y un presentador del circo inquietante se diseminaban por las calles de Trillo para entregar por doquier entradas para el “Horror Circus” de la Noche del Terror. Con ellas, los trillanos tenían acceso a la galería del pánico en que los chicos de Ecoaventura habían convertido el edificio de las antiguas escuelas.

Este año, los personajes provocaron el miedo partiendo del humor, siempre presente en el circo, al que buscaron su lado más oscuro. El presentador loco abría la verja de la galería, chirriante, para darle paso a los valientes, en grupos de cuatro.

Un malabarista de miembros desproporcionados era lo primero que veían los visitantes, que después debían atravesar el camerino del fantasma de una trapecista y de su esquelética gemela, y de los payasos malvados de cabezas giratorias. El horror continuaba por diferentes estancias donde las luces, los sonidos y la trapecista fantasma, siempre llevándoles la delantera a los trillanos de manera inexplicable, perseguían a los trillanos. Fieras desbocadas y cajas llenas de sorpresa en el almacén del circo completaban un recorrido fantasmagórico en el que no faltó el carrusel del circo.

De forma paralela, quedaron abiertos los talleres de maquillaje para niños y mayores, en los que iban tomando forma desde horrendas heridas hasta divertidas caracterizaciones festivas en las caras de los participantes. La ruleta de truco o trato tenía premio para todos.

Trescientas personas se dieron cita en esta ocasión para sacarle de nuevo, una sonrisa al miedo en la noche de Todos Los Santos. No faltaron los grupos de disfraces, cada año más elaborados, con los que varios grupos de trillanos participaron en la fiesta.