El PSOE urge a Román que baje realmente los impuestos, convoque un plan de empleo y arregle el desastre de los autobuses

Valerio ha hecho un repaso del año que termina recordando que los concejales del PSOE han trabajado desde la cercanía para recoger las demandas de los vecinos de la capital y orientar a partir de ellas su acción de oposición.

Fruto de esa labor han sido más de una veintena de mociones presentadas en el pleno municipal –todas las que permite el reglamento- y una treintena de preguntas, todas ellas rechazadas por Román y el Equipo de Gobierno del PP. “Ha utilizado su mayoría absoluta para hacer y deshacer a su antojo, pasando no solo de los grupos de la oposición, sino también de las demandas de los ciudadanos, que es lo peor”, ha afirmado Valerio.

El resultado es que Román ha quedado en evidencia “estrellándose” con la gestión de los servicios público. Su fracaso más sonado ha sido el nuevo servicio de autobuses urbanos, que ha resultado ser “un desastre sin paliativos”, como prueba la pérdida de 850.000 viajeros desde que entró en funcionamiento el pasado mes de abril.

Además, el alcalde se ha mostrado incapaz de reaccionar a tiempo y ha engañado a los usuarios anunciado soluciones que no llegan nunca. Para la portavoz socialista, la única forma de arreglar algo a estas alturas es resolver el contrato de mutuo acuerdo con la empresa adjudicataria y empezar de nuevo, convocando la Mesa de Movilidad y escuchando a los ciudadanos y a los grupos de la oposición, a diferencia de lo que ha hecho Román hasta ahora.

Román también ha tenido que dar marcha atrás en el “megacontrato o, mejor, meganegocio”, con el que pretendía dejar vendidos una gran parte de los servicios municipales a una empresa para un periodo de 20 años, por un importe de 270 millones de euros. El PSOE presentó un recurso en contra y el Tribunal de Recursos Contractuales declaró nulo de pleno derecho el concurso. No obstante, la lista de fiascos es mucho más amplia, e incluye otros como la paralización de las obras del Museo Francisco Sobrino, el fallido parque de las Torres o el caos de las obras del denominado Eje Cultural.

Este ha sido también el año en que Román ha dicho que no a los cerca de 9.000 parados que hay en la ciudad negándose a convocar un plan de empleo. Tampoco ha hecho nada para desarrollar suelo industrial del polígono del Ruiseñor, ni ha exigido a Cospedal que invierta en Guadalajara para dinamizar la actividad económica y crear empleo. Así, sigue parado el nuevo Hospital y se han abandonado los proyectos del campus universitario y el parque científico y tecnológico.

“A cambio de ello, Román ha optado un año más por seguir extorsionando el bolsillo de los ciudadanos, que cada vez pagan más por menos y peores servicios”, ha asegurado Valerio. De hecho, no solo ha consolidado el incremento de la contribución urbana, que ha subido un 40% desde que es alcalde, sino que ya ha aprobado un aumento medio del 30% en el recibo del agua para el nuevo año.

La portavoz socialista ha lamentado que “nada de todo esto se pueda leer en el periódico municipal que Román ha creado, gastándose cerca de 200.000 euros de dinero público para darse autobombo, manipular la realidad y hacer competencia desleal a los medios de comunicación de la ciudad”.