Más de 10.000 personas en Guadalajara padecen algún tipo de alergia

El aumento en la prevalencia de la alergia alimentaria, por el número de alimentos implicados y la gravedad de las reacciones, es motivo de preocupación tanto de consumidores, como de alergólogos y consecuentemente de las autoridades sanitarias. En este sentido, y con el objetivo de poner de manifiesto la importancia de esta patología se celebra desde hoy y hasta el próximo día 14 de abril la tercera edición de la Semana Mundial de la Alergia, que en esta ocasión presta especial atención a la alergia a alimentos.

Por edades.-

La doctora Vega ha explicado que respecto al tipo de alimentos implicados, los datos varían según el grupo de edad sometido a estudio, el área geográfica y los hábitos alimenticios. En los niños, el huevo y la leche de vaca son los nutrientes implicados con mayor frecuencia, en especial en los menores de cinco años. Ésta disminuye con la edad, lo que refleja el desarrollo de tolerancia a estos alimentos. En los dos primeros años de vida aparece también la alergia al pescado, que es más persistente y por tanto permanece en niños mayores y adultos.

La alergia a frutas y frutos secos es más habitual a partir de la adolescencia, y son los que producen más reacciones alérgicas en la población adulta. Aunque en las consultas de alergia infantil se ha observado, en los últimos años, que la reacción con los frutos secos se manifiesta cada vez a edades más tempranas y con clínica grave.

Tratamiento

Hasta hace algunos años el único tratamiento disponible para la alergia a los alimentos era la dieta de exclusión total del alimento. El problema radica en que el paciente alérgico puede exponerse de forma accidental al mismo y sufrir una reacción grave, además de suponer en muchos casos la renuncia a actividades sociales por el miedo a sufrir una reacción.

Es muy importante saber que pueden existir alimentos ocultos, es decir fuentes de alérgenos frente a los cuales se es alérgico y que pueden pasar inadvertidos al estar enmascarados o no contemplados en la etiqueta, sobre todo en los platos preparados.

La doctora Belén Mateo, de la sección de Alergia del Hospital, ha afirmado que “una dieta exenta de algún alimento no es fácil y conlleva muchos problemas sociales, económicos, y para la propia salud, así como una disminución de la calidad de vida, agravándose en el caso de personas alérgicas a más de un alimento. Afortunadamente, desde la década de los 90 se está investigando e implantando el tratamiento activo para la alergia a los alimentos lo que se conoce como inmunoterapia oral o desensibilización con alimentos”.

La doctora Mateo ha explicado que hoy día someterse a inmunoterapia oral puede ayudar a solucionar este problema. Esta terapia que consiste en administrar cantidades progresivamente crecientes del alérgeno, alimento o fracciones del mismo, con el fin de modular la respuesta inmunitaria para inducir la tolerancia a dichos alimentos, alcanza una tasa de éxito superior al 80%.

En la actualidad en el Hospital Universitario de Guadalajara 53 personas se han sometido a desensibilización de leche y huevo y únicamente cinco de ellas han suspendido el tratamiento, una por decisión propia y cuatro porque no respondían bien al mismo.

Finalmente, la presidenta de la Asociación de Alérgicos a Alimentos de Guadalajara (ALERGUADA), Marga Pino, ha destacado la problemática social que encuentran las personas con este tipo de diagnóstico. La presidenta de ALERGUADA, ha apuntado que es necesaria la formación de profesionales de diferentes áreas que están en contacto con niños que tienen alergias alimentarias “para que sean capaces de reaccionar cuando están bajo su responsabilidad, como puede ser el colegio o clases extraescolares.” Asimismo ha incidido en que la hostelería debe ampliar conocimientos en este sentido para evitar, cuando tengan un caso de alergia a alimentos, cualquier tipo de reacción.