El Ayuntamiento de Alcázar de San Juan presenta una querella contra el ex alcalde Sánchez Bódalo por prevaricación, tráfico de influencias y malversación de fondos

“El compromiso que este equipo de gobierno tiene ante los ciudadanos de transparencia y responsabilidad se esta cumpliendo”, ha asegurado el alcalde, quien ha relatado que se ha realizado un estudio de la empresa “ante las presuntas irregularidades observadas en cuanto a la adjudicación de obras y la generación de una deuda de más de seis millones de euros”. Según el alcalde, en el informe se reflejan “un montón de irregularidades”.

El alcalde de Alcázar asegura que el objetivo de la querella “no va con la intención de ir contra nadie”. “La única intención con la que trabaja este equipo de Gobierno es la defender y poner encima de la mesa cualquier aspecto que tenga que ver con los intereses generales de los vecinos de Alcázar, y con la obligación moral de poner en conocimiento de los tribunales estas actuaciones por parte de los anteriores responsables de Aguas de Alcázar”.

Según el primer edil, la querella denuncia “presuntas actuaciones delictivas de prevaricación trafico de influencias y malversación caudales públicos”.

El responsable de Ciclo Hidráulico, Ángel Montealegre cree que el pasado viernes “fue un día triste para Alcázar, cuando se entregó la documentación de la querella en el juzgado, por un ejercicio de responsabilidad y poner todo en manos de la justicia; si no lo hacíamos estaríamos encubriendo un delito”.

Montealegre sostiene que “Aguas de Alcázar pasó de ser una empresa pública que gestionaba el ciclo hidráulico a convertirse en una empresa constructora, donde se modificaban y organizaban los estatutos para que se pueda eludir todo tipo de control político, económico y financiero”. Para el concejal, “con las adjudicaciones de obras se pone sobre la mesa la presunta ilegalidad de la adjudicación de obras que debía de haber licitado el ayuntamiento y que se delegó en Aguas de Alcázar, incumpliendo la ley de contratos de las administraciones publicas”.

También recordó Ángel Montealegre la “supermillonaria deuda” que tiene esta empresa: más de seis millones de euros, “de los cuales casi dos millones y medio son facturas que el Ayuntamiento de Alcázar no reconoce y que los técnicos del ayuntamiento no firman; hay un descontrol importante”.