cartas al periódico
Registro Civil de Guadalajara, madruga y la suerte estará echada
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:14h
Sr. Director:
¿Ha visitado alguna vez el Registro Civil de Guadalajara en su sección de matrimonios y nacionalizaciones? ¿No? Pues no sabe lo que se pierde.
Es todo un viaje en el tiempo. Es como volver a la antigua Roma o a la Edad Media y a esas viejas normas de funcionamiento.
Si quieres tramitar un expediente relacionado con matrimonio o adquirir una relación con el Estado español y nacionalizarte, tendrás que empezar por levantarte a las 6 de la mañana para conseguir estar en la lista de los 15 elegidos para ese día.
“A quien madruga Dios le ayuda”, dice un sabio refrán español y en ese Registro público tendrás que echar mano de ayuda divina, suerte y de paciencia, si no quieres enfrascarte en una discusión con el personal que te atenderá y con su forma de organización. Presta mucha atención al retraso acumulado por una joven doncella que te atenderá en la sección de matrimonios, que continuamente se referirá a esta excusa para no contestar a tus dudas. Y te dirá que sí y te dirá que no, y te dirá que blanco y te dirá que negro. Y te dirá que acumula un retraso de hora y media. ¡Claro!, y si lo dices 20 veces, el retraso será de dos horas. Seguro que los registradores del imperio romano no disponían de tratamiento informático, los de Guadalajara tampoco. Una Administración lenta es una mala Administración. El Registro Civil de Guadalajara es el ejemplo de una mala organización que hace perder mucho el tiempo y crea malestar entre los que vamos a realizar una gestión allí.
Madruga y la suerte estará echada.
Antonio de Miguel Antón. Guadalajara