Editorial
Los presupuestos de Castilla-La Mancha, ineficaces para salir de la crisis
Zapatero reduce en un 30% la aportación del Estado a Castilla-La Mancha
miércoles 22 de octubre de 2014, 11:14h
Ya se conocen los presupuestos de Castilla-La Mancha para el presente curso. Una incoherencia más en la gestión de un Gobierno socialista que se muestra al igual que su homólogo nacional, totalmente incapacitado para afrontar la crisis con solvencia. Todos los manuales de Economía asumen como lógico que en momentos de crisis hay que aumentar la inversión en ciertos sectores para dinamizar el crecimiento y no minar el futuro de la población.
En este sentido, es especialmente sangrante la decisión de recortar en un 5,8 % los presupuestos para Educación. Precisamente es el futuro lo que no se puede dejar a la ligera en estas circunstancias. Sin embargo, el Gobierno de Barreda intenta, como en el Despotismo Ilustrado, tapar sus vergüenzas con inauguraciones como la de la circunvalación que une los polígonos del Henares y de Cabanillas de esta semana. También con proyectos
faraónicos y utópicos como la Autovía de La Alcarria, que no termina nunca de arrancar y que a buen seguro repetirá su lugar como promesa electoral en las inminentes elecciones autonómicas. Así se sale del paso momentáneamente, pero se deja un triste legado para nuestros hijos. Sin educación, no hay proyecto de futuro que pueda salir adelante.
Algo estará haciendo mal el Gobierno de Barreda, cuando las críticas le llegan desde islas tan distantes como la del Partido Popular y la de Comisiones Obreras. Con el agua al cuello, la presentación Socialista de los presupuestos regionales pasó de puntillas sobre el tema de los recortes. La portavoz se lanzó rápidamente a defender la idea de que su labor durante la legislatura ha servido para incrementar los presupuestos de 2011 con respecto a los de 2007. No se da cuenta que el pasado, pasado está, y que lo único que pone esto de manifiesto es su incapacidad para solventar problemas. Cuando todavía el bolsillo estaba lleno era muy fácil derrochar y vender a la luz pública que Castilla-La Mancha seguía creciendo. Ahora que ya no se puede seguir ocultando la crisis, llegan los lamentos.
Hoy estamos sin ahorros y en una situación mucho peor que la de hace cuatro años. Esto indica que la región se merece un cambio. Pero un cambio a tiempo completo. Un cambio en el que el nuevo Gobierno demuestre su eficiencia sin interferencias de otros menesteres nacionales. El caso contrario sería contraprudecente para los intereses de los ciudadanos castellano-manchegos.
Esta semana se ha conocido que la nueva línea del AVE de Madrid-Cuenca-Valencia con una conexión a Albacete se pondrá en marcha antes de final de año. Más humo para convencer, de manera irresponsable, a unos ciudadanos a los que no quieren educar para quitarles su capacidad de decisión. Sin embargo, pasan de puntillas para decir que las inversiones en infraestructuras se reducirán un 30% para el próximo año.
Definitivamente, el Gobierno regional ha pensado que sus conciudadanos son menos inteligentes que sus excelencias. Y, si no lo son, se les mantiene ocupados con una televisión pública, en la que invierten cada año 60 millones de euros, y que no da cuentas públicas de dónde va destinado ese dinero. Sería una verdadera pena que tengamos que seguir comulgando con ruedas de molino cuatro años más. Se acerca el momento crítico y todo está en el aire.◆