Buen corazón, diferente sangre

Don Mariano está consiguiendo, con el beneplácito y apoyo, voluntario e involuntario, de un gran número de miembros de su gremio de diferentes partidos, el santo grial de su campaña: retirar de la opinión pública el concepto de izquierda y derecha del vocablo ideológico español. Maldad no: es simplemente su ideología. Cuando la izquierda y la derecha se extingan, volverá la derecha a contener el feudo. Ya lo hacen, no hay más que ver como se ríen de las manitas, strippers callejeras a lo Jill Love y caceroladas como máxima expresión de lucha.

Don Mariano ha recortado en Sanidad y Educación pública, pero no por ver a infantes sin futuro o al pueblo muriendo por las calles. Ha hecho una reforma laboral contra los intereses de trabajadores y trabajadoras, pero no por simple gusto fetichista. Retiró la paga de navidad de los funcionarios y funcionarias, sin embargo no quiere dejarles sin pavo.

Subió el IVA sabiendo que sería impopular, aunque le fastidie que los relojes de lujo aumenten de precio; ha reducido impuestos a las empresas, adelgazado el número de las públicas, privatizado servicios básicos y “flexibilizado a los parados y paradas” o, en otras palabras, reducir aún más las prestaciones de ese dinero que, trabajando, hemos colaborado en reunir para el conjunto de las personas que tuvimos un salario. Y sigue contando, que ahora vendrá la privatización de las pensiones a lo Pinochet. Y sin hablar de los bancos, que dan palmas con las orejas.

Pero que nadie se confunda: esto no es con mala fe. Si nos situamos desde su posición y desde su ideología, podemos observar como está beneficiando enormemente los intereses de sus votantes, de sus representados, de su clase. No es maldad, es supervivencia. La clase empresarial, donde se ubica desde el banquero hasta ese señor que tiene una gran superficie, sale tremendamente beneficiada de esto. Porque no se nos puede olvidar un detalle: para que la clase empresarial viva mejor, la clase trabajadora debe vivir peor. Y eso es algo que, al fin, están comprendiendo en mi partido, el Partido Socialista Obrero Español y, desde Juventudes Socialistas de Guadalajara, estamos transformando en hechos la defensa de los intereses de la clase trabajadora. Porque no podemos tener contento a todo el mundo y porque tenemos que estar orgullosos y orgullosas de representar a nuestra clase, en mayúsculas. Por suerte y coherencia, está llegando el día en el que los partidos de izquierda defenderemos con la misma fuerza a la clase trabajadora internacional que el Partido Popular a la clase capitalista mundial. Y cuando llegue ese día no habrá vuelta atrás, será una evolución histórica.

Jorge del Castillo Morales, secretario local de formación e ideas del PSOE de Guadalajara, miembro de Izquierda Socialista-PSOE y secretario provincial de empleo y políticas económicas de Juventudes Socialistas de Guadalajara.