Un ciberataque chino roba los datos de millones de ciudadanos de EEUU

China ha pirateado la base de datos de empresas de energía eléctrica y de telecomunicaciones en Estados Unidos durante décadas, robando archivos sensibles y propiedad intelectual como diseños de chips en un intento de obtener una ventaja sobre Estados Unidos y Europa.

Tras un año de investigación, una docena de agencias de inteligencia occidentales, entre ellas el CNI, han confirmado un ciberataque de gran alcance perpetrado por un grupo conocido como Salt Typhoon (Tifón Salino en castellano) representando el ciberataque más ambicioso de China hasta la fecha.

Según informe The New York Times el ataque del Tifón Salino fue un asalto coordinado que duró años y que infiltró a importantes compañías de interés estratégico. El alcance del ataque fue mucho mayor de lo que se creía inicialmente, y las autoridades de seguridad advirtieron que los datos robados podrían permitir a los servicios de inteligencia chinos rastrear objetivos, como políticos, espías y activistas.

Los investigadores vincularon el ataque del Tifón Salino con al menos tres empresas tecnológicas con sede en China que operan desde al menos 2019, pero la operación se descubrió el año pasado. El comunicado conjunto indicó que las empresas trabajaban para las agencias de inteligencia militar y civil de China, que realizan operaciones en el extranjero.

Los piratas informáticos patrocinados por el gobierno chino «están apuntando a redes a nivel mundial, incluidas, entre otras, las redes de telecomunicaciones, gubernamentales, de transporte, de alojamiento y de infraestructura militar», afirma el comunicado.

Las agencias de inteligencia occidentales han descrito el ataque como «descontrolado» e «indiscriminado». Canadá, Finlandia, Alemania, Italia, Japón y España también firmaron la declaración, que formaba parte de una campaña para denunciar públicamente al régimen chino de Xi Jinping.

«No puedo imaginar que ningún estadounidense se haya salvado dada la amplitud de la campaña», dijo a The New York Times Cynthia Kaiser, ex alta funcionaria de la división cibernética del FBI, que supervisó las investigaciones sobre el ciberataque.

El ataque al Tifón Salino podría marcar el inicio de una nueva era en las capacidades cibernéticas chinas, que pondrá a prueba a sus rivales estratégicos, incluido Estados Unidos, según expertos en seguridad.