La Diputación de Guadalajara ha dado luz verde a una Estrategia Territorial Integrada que busca fortalecer el tejido cultural, social y económico de la comarca, con el objetivo de alcanzar la declaración como Patrimonio Mundial por la UNESCO en la categoría de Paisaje Cultural. Esta decisión fue tomada durante la sesión plenaria celebrada recientemente.
El plan estratégico contempla el desarrollo del “Paisaje Dulce y Salado de Sigüenza y Atienza”, y ha recibido el apoyo unánime de todos los grupos políticos presentes. Además, se aprobó una asignación presupuestaria de 1.400.000 € para la rehabilitación de las Salinas de Imón, que será parte de una modificación de crédito más amplia, que asciende a un total de 6.320.000 €.
Estrategia y financiación para el futuro
Arantxa Pérez Gil, diputada delegada de Turismo y portavoz del equipo de Gobierno, explicó que ambos acuerdos están interrelacionados. La aprobación de la estrategia es un paso necesario para solicitar financiación mediante la convocatoria de Expresiones de Interés del Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), correspondiente al periodo 2021-2027.
Esta convocatoria está destinada exclusivamente a diputaciones en comunidades autónomas como Castilla-La Mancha, Andalucía, Extremadura y Castilla y León, enfocándose en proyectos en áreas despobladas. La estrategia aprobada se basa en la candidatura ya respaldada por el Consejo Rector del Paisaje Dulce y Salado.
Rehabilitación histórica: las Salinas de Imón
Con esta iniciativa se pretende establecer un sistema integral y sostenible para gestionar el paisaje cultural en las regiones de Sigüenza y Atienza. Se priorizarán políticas que mejoren la investigación, conservación y difusión del patrimonio cultural, lo cual contribuirá al fortalecimiento del entorno cultural y económico local.
Pérez Gil destacó que estas acciones permitirán realizar intervenciones directas en el área delimitada por los ríos Dulce y Salado. Un ejemplo significativo es la recuperación de las Salinas de Imón, reconocidas como la explotación salinera más antigua del país, que tuvo un papel crucial durante la Edad Media debido a su producción e importancia territorial.
La modificación presupuestaria aprobada destina 1.400.000 € a este proyecto tras haber conseguido que el Ayuntamiento de Sigüenza obtuviera la cesión del uso de estas instalaciones por parte de sus propietarios privados.