Me han ofrecido ser un Mariachi

La comida fue bien, y la conversación mejor. Ambiente distendido. Pasamos a un saloncito (privado, me dijeron) donde se podía fumar. Estupendo. Chivas y mi habano preferido, Ramón Allones, Doble Corona. Estoy preparado para escuchar esa tentadora oferta de trabajo…

Después de hora y media de conversación y de plantear el tema, las despedidas de rigor, y me comprometo a pensar en el asunto y dar una respuesta en 48 horas.

Parece ser que tenía yo una idea equivocada de lo que era un mariachi en España.

Un mariachi en España, por lo que se ve, es un inversor ficticio al servicio de los que tienen dinero. Un mariachi es, como me dijeron, un inversor falso que utilizan los millonarios de turno, para inflar o engordar el número de socios que necesitan para crear una cosa que se llama SICAV (que es el acrónimo de Sociedad de Inversión de Capital Variable).

En ocasiones, estos mariachis son amigos o familiares del millonetis en cuestión, que reciben de forma gratuita una pequeñísima participación en forma de acción. Pero también hay mariachis 'profesionales', que generalmente son empleados de banca o gestores de bolsa.

Según me cuentan, las Sicavs se diseñaron en la etapa de Felipe González en 1983, para evitar la fuga de capitales, fomentando el ahorro colectivo a través de la inversión en los mercados financieros. De ahí que para montar una Sicav sea necesario tener cien o más socios, (es decir, mariachis) y un mínimo de 2,4millones de euros. Pero, en la práctica, la mayoría de las Sicavs, dicen los expertos “se ha convertido en los vehículos que utilizan los grandes patrimonios para canalizar sus ahorros, aprovechando que tienen forma societaria, pero con una tributación más ventajosa (las Sicavs pagan un 1% del Impuesto de Sociedades frente al 30% habitual), y es ahí donde está el truco, y el motivo que hace que en España haya más de 3.100 Sicavs frente a unos 2.300 Fondos de Inversión. (Según los inspectores de Hacienda, las tres mil cien Sicavs que hay en España "gestionarían un patrimonio de 31.000 millones de euros, tributando tan solo al 1%". ¡Ahí queda eso!).

Desde entonces, ningún presidente del gobierno de España ha tenido lo que hay que tener para que estos ricos arrimen el hombro como el resto de los contribuyentes, y se cumpla el principio básico de progresividad -recogido en la Constitución del 78- de todo sistema fiscal democrático decente: Que pague más, quién más tiene.

Ciudadanos empresarios como Amancio Ortega (Zara), Alicia Koplowitz (FCC), Isaac Andic (Mango), la familia del Pino (Ferrovial), hasta famosos como Pedro Almodóvar o Ana Rosa Quintana, hacen uso de estas Sicavs para tributar sólo al 1 %.

Aunque, según me he informado, ser un mariachi “es legal, aunque el espíritu de la norma no se está cumpliendo”, creo que no voy a agotar el plazo de 48 horas y voy a rechazar de plano esta proposición que me hacen, legal, pero a todas luces, indecente.