La reciente popularidad de una herramienta de inteligencia artificial que transforma fotos en imágenes con estilo Ghibli ha generado preocupación entre expertos de Qustodio. Aunque estas aplicaciones permiten a los usuarios compartir versiones estilizadas de sus imágenes, existe el riesgo de que las fotos se almacenen en la nube sin un control adecuado sobre su uso y gestión. Los especialistas advierten sobre los peligros del "sharenting", especialmente al compartir fotos de menores, ya que los datos podrían ser utilizados sin consentimiento. Qustodio recomienda evitar el uso de fotos personales, investigar cómo se manejan los datos en estas plataformas y educar a los niños sobre los riesgos asociados. La gerente de comunicación de Qustodio enfatiza la necesidad de un uso responsable y consciente de la IA generativa.
Recientemente, una herramienta de Inteligencia Artificial ha ganado popularidad en las redes sociales al transformar fotos comunes en imágenes que evocan el estilo de las películas del Studio Ghibli. Sin embargo, los expertos de Qustodio han emitido advertencias sobre los riesgos asociados a esta práctica. Al compartir imágenes a través de estas aplicaciones, existe una alta probabilidad de que queden almacenadas en la nube, sin que los usuarios tengan claro cómo se gestionan o con quién se comparten.
En los últimos días, las plataformas sociales se han inundado de imágenes entrañables que parecen sacadas directamente de un filme animado japonés. Esta tendencia ha despertado una oleada de creatividad y nostalgia entre los usuarios. No obstante, los especialistas de Qustodio, reconocida por su enfoque en la seguridad digital y el bienestar online, advierten sobre las implicaciones que pueden pasar desapercibidas para muchas familias. ¿Es realmente seguro compartir fotos de niños utilizando modelos de IA generativa?
El fenómeno conocido como sharenting, que implica compartir imágenes de niños en redes sociales, adquiere una nueva dimensión con la llegada de estas herramientas avanzadas. Aunque estas fotos no se publican directamente en plataformas sociales, sí son almacenadas por sistemas de IA que procesan y guardan datos, muchas veces sin el conocimiento del usuario sobre su gestión o distribución. Especialmente en aplicaciones que no pertenecen a grandes corporaciones tecnológicas con políticas robustas de privacidad, hay un riesgo significativo de que la información sea compartida con terceros, incluyendo datos biométricos extraídos de las fotografías. Esto plantea la inquietante posibilidad de que los rostros infantiles sean utilizados para entrenar algoritmos sin un consentimiento explícito.
¿Cómo disfrutar de la creación artística mediante IA sin comprometer la seguridad?
En un mundo digital donde los datos personales tienen un valor creciente, es fundamental proteger la identidad de los menores. Este compromiso debe ser asumido tanto por padres como por educadores y plataformas tecnológicas. Por ello, los expertos recomiendan adoptar un enfoque responsable y seguir ciertas pautas:
Emily Lawrenson, gerente de comunicación en Qustodio, reflexiona: "La IA Generativa presenta oportunidades emocionantes, pero también requiere una comprensión crítica acerca de sus límites y peligros. Publicar una foto entrañable puede parecer un acto inofensivo; sin embargo, es vital recordar que al subirla a la nube, perdemos control sobre su futuro."
No es completamente seguro, ya que aunque las imágenes no se publican directamente en redes sociales, pueden quedar almacenadas en plataformas de IA que procesan y almacenan datos sin el conocimiento del usuario sobre cómo se gestionan ni con quién se comparten.
El sharenting puede ser más riesgoso con herramientas de IA, ya que las aplicaciones pueden almacenar y compartir información, incluyendo datos biométricos extraídos de las fotografías, lo que podría exponer a los menores a usos desconocidos sin su consentimiento.
Se recomienda evitar usar fotos personales, indagar en cómo la plataforma utiliza los datos e imágenes, y hablar abiertamente sobre cómo funciona la IA para concienciar a los niños sobre los riesgos asociados.
Los expertos sugieren evitar usar fotos personales, revisar cómo la herramienta almacena y comparte datos, y educar a los niños sobre los riesgos de compartir imágenes en línea.
Emily Lawrenson destaca que aunque la IA generativa ofrece oportunidades fascinantes, es importante tener una comprensión crítica de sus límites y riesgos, recordando que al subir una foto a la nube se pierde control sobre su destino.