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Instalar una chimenea, una alternativa para ahorrar en calefacción

REDACCION | Martes 27 de septiembre de 2022

Después de los sofocantes meses de verano, estamos dejando atrás el calor para dar paso a un clima más fresco. En años anteriores, el momento de buscar la forma de calentar nuestros hogares llegaba cuando el frío ya era irremediable. Sin embargo, la crisis de abastecimiento del gas y los altos precios en la factura tanto de este combustible como de la luz, nos han llevado a buscar soluciones con mayor previsión sin esperar el fin de los días cálidos.

Así, la compra de leña se ha disparado en España, el consumo de sacos de pellets ha aumentado y la venta de chimeneas de leña no ha hecho más que subir y según los datos de la Asociación Española de Fabricantes de Estufas, Chimeneas y Cocinas para Combustibles Sólidos (AEFECC) se prevé un incremento de las ventas en el sector que oscilará esta temporada entre el 17% y el 30%.

Pero en la búsqueda de alternativas para mantener los espacios calientes durante el invierno, no debemos perder de vista que no todas las casas están acondicionadas para todas las opciones que existen en el mercado y que quizás consideramos como las más indicadas en un primer momento. Por este motivo, los expertos de la plataforma digital para la mejora del hogar, habitissimo, nos ofrecen consejos que debemos tener en cuenta a la hora de elegir, instalar y mantener una chimenea, si es que hemos decidido apostar por esta solución para calentar nuestra vivienda este invierno.

En primer lugar, indican que antes de instalar una chimenea es imprescindible que evaluemos si es necesario un sistema de evacuación de humos. Además, debemos tener en cuenta que los parámetros varían según el tipo de vivienda. “En el caso de edificios, si no existe salida de humos, es muy complicado poder instalar una chimenea en un piso, a menos que sea una vivienda bajo cubierta. En este caso, se necesitaría permiso de la comunidad de vecinos y licencia del Ayuntamiento. En una vivienda unifamiliar estas limitaciones son mucho menores”, añaden desde habitissimo.

Asimismo, subrayan que a la hora de instalar este tipo de soluciones de climatización, es muy importante tener en cuenta en qué parte de la vivienda se instalan las bajantes y las ascendentes del sistema, pues son uno de los elementos clave a tener en cuenta para garantizar la seguridad y el correcto funcionamiento del sistema una vez que se encienda por primera vez. “Además, han de llevarse a cabo revisiones periódicas para asegurarnos de que no se producen fugas de gas ni errores en el funcionamiento de la chimenea”, inciden desde habitissimo.

Asimismo, subrayan que debemos instalar la chimenea en espacios lo suficientemente amplios donde la salida de humos se pueda realizar en vertical y, a ser posible, sin codos ni que compliquen la correcta trayectoria del humo. “Si tenemos pensado instalar tubos para que el calor llegue a otras estancias, lo ideal es que la chimenea esté lo más centrada posible”, destacan desde habitissimo. Cuando se trate de una chimenea de gas, será imprescindible realizar la conexión a la red de gas natural o de propano, mientras que con las chimeneas de bioetanol o eléctricas no existe ninguna complicación, puesto que no es necesaria la salida de humos. Se pueden instalar en cualquier espacio incluso sin necesidad de realizar obras.

En el caso de la construcción de chimeneas de obra, también hay diferencias en la instalación dependiendo de si es en pisos o en viviendas unifamiliares. El combustible es, de nuevo, el que marca las limitaciones. De esta forma, cuando se trate de chimeneas de leña, en pisos en altura no se podrá instalar salvo que haya preinstalación de salida de humos. Si su instalación es posible, es esencial que tanto nuestro hogar como la salida de humos cumplan con la normativa en lo que se refiere a resistencia a las temperaturas y aislamiento. Esto aplica de igual manera a las chimeneas de leña y de gas.

También tendremos que considerar el espacio disponible en estos casos y el tipo de chimenea que se desea instalar. Estas pueden ser encastradas, que requiere de muros anchos o de tabiques; semiencastrada; o exenta, que solo se pueden instalar en espacios amplios, puesto que sobresale completamente de la pared. A esto, añaden los expertos, debemos sumarle la posibilidad de instalar elementos o accesorios para aumentar su eficiencia o mejorar la seguridad, como insertables, casetes o, mucho más sencillo y económico, un salvachispas de chimenea.

EL MANTENIMIENTO

Hacerle un buen mantenimiento a la chimenea es fundamental para su funcionamiento óptimo. Y, según señalan los expertos, su calidad dependerá en buena medida del combustible. En el caso de las chimeneas de leña, además del vaciado del cajón de las cenizas y la limpieza de los revestimientos y el cristal del casete, hay que deshollinar de manera periódica y revisar que no haya fisuras en los elementos refractarios.

En este sentido, agregan que “el Reglamento de Instalaciones Térmicas en los Edificios (RITE) aconseja revisar y limpiar, si fuera necesario, dos veces por temporada. Sin embargo, dependerá del uso que tenga la instalación” indican desde habitissimo. Si realizamos este procedimiento de manera anual, lo ideal es hacerlo antes de que llegue el frío, cuando los conductos están secos. En todo caso, mucho más frecuente debe ser el vaciado del cajón de las cenizas, la limpieza de los revestimientos y la del casete, si es que lo tiene.

Por su lado, una chimenea de gas tiene un mantenimiento más simple, ya que la combustión apenas genera residuos. “El trabajo básico sería la limpieza periódica del conducto de evacuación y el interior de la chimenea, así como una revisión de las válvulas y la comprobación de que no hay fugas”, exponen desde habitissimo. Por último, indican que las chimeneas eléctricas y las de bioetanol no necesitan apenas mantenimiento debido a sus especiales características y el tipo de combustible o energía que utilizan.

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