Entrevista a Rubén Barrios: “Mis jugadores son deportistas naturales”

Y cuando hablas de personas que suman en la sombra, mención especial tengo que hacer para Carlos Romera; la de llamadas que nos hemos cruzado, reuniones, mensajes, a horas intempestivas…a 1 de Agosto teníamos 6 jugadores en la plantilla únicamente, no se ha perdido un entrenamiento, lleva a jugadores a los entrenamientos, a los partidos,…es de esas personas que crean valor en un club.

Respecto a los títulos, este es mi sexta temporada en la 2ª División “B” con 5 primeros puestos y un segundo. Ésta es la primera vez que repito título con un club, ya que los 4 anteriores habían sido con equipos distintos.

Míster, ¿dónde ves la clave de haber ganado la liga con aún 4 partidos por jugar?

Creo que este es el año que mayor nivel técnico y de jugadores hay en el grupo. Hablamos de 5-6 equipos todos con jugadores que han jugado recientemente en Primera División, ex internacionales, equipos con plantillas confeccionadas con opciones de ascenso, un grupo dificilísimo con salidas a campos de altísimo nivel de exigencia. Canchas como Cuellar, Albacete, Bargas, que son equipos en puestos bajos de la clasificación pero muy muy competitivos como locales.

Todo esto da mucho más mérito a mis jugadores, la clave son ellos, su exigencia, su ambición, su capacidad, son deportistas naturales: saben, conocen y respetan el valor del trabajo y del grupo; sin duda son el mayor activo del Club. Para mí es un placer y un honor intentar hacerles cada día más competitivos. Han demostrado ser, con esta diferencia, el mejor EQUIPO.

Y ahora ¿qué?¿esperar el final del campeonato para jugar el play-off?

Ahora a seguir entrenando para que el equipo gane en competitividad, para que el equipo alcance su máximo nivel, podemos dar más.

Desde el primer día les dije a mis jugadores que jugaremos según entrenemos, que mi obligación es trasmitirles la tensión que luego vivirán en el campo. No estoy aquí para divertirnos, estoy aquí para alcanzar el máximo rendimiento como equipo.

Si ahora bajamos la intensidad al 80%, acabaremos jugando al 80 %, habituaremos al cuerpo y a la cabeza a jugar y exigirse ese ritmo; y luego no cambias el chip para dos partidos de un playoff por un acto de voluntad e intención. Además, la competición y el resto de equipos se merecen un respeto.